Alfredo Beltrán Leyva, rival de 'El Chapo', se declara culpable de tráfico de drogas

Alfredo Beltrán Leyva, cuya familia llegó a dirigir uno de los carteles más poderosos de México, se ha declarado culpable ante un tribunal de Estados Unidos de haber sido cómplice de orquestar el desembarco de toneladas de cocaína y de metanfetamina en el suelo de Obama.

Alfredo y varios de sus hermanos fueron, según cuentan algunos de sus conocidos, estrechos colaboradores de Joaquín "el Chapo" Guzmán — el infame magnate de la droga que fue arrestado de nuevo el pasado 8 de enero después de haberse escapado de una prisión de alta seguridad el verano pasado.

"Alfredo Beltrán Leyva había colaborado durante décadas en la dirección de uno de los carteles mexicanos de mayor envergadura. La organización sembró la violencia a espuertas y desestabilizó miles de existencias", escribió Loretta Lynch, fiscal general de Estados Unidos, en un comunicado publicado ayer. El comunicado en cuestón informaba de la captura del mexicano y de su sorprendente declaración de culpabilidad.

Alfredo Beltrán Leyva fue detenido en 2008 y se convirtió en uno de los delincuentes más buscados de México caídos durante el mandato del ex presidente Felipe Calderón, quien arrancó una indiscriminada ofensiva paramilitar contra el crimen organizado en su páis hace más de una década. El arresto de Beltrán Leyva desencadenó una guerra especialmente sangrienta entre los hermanos y Guzmán que dividió al cartel de Sinaloa y arrasó el estado del que la organización criminal había tomado su nombre.

El enfrentamiento se desencadenó después de los Beltrán Leyva acusaran a el Chapo de haber informado a las autoridades del paradero de Alfredo, quien se encontraba escondido en una casa franca en Culiacán, la capital de Sinaloa. Unos meses después, las fuerzas del orden le tendieron una emboscada que resultaría en la muerte de Edgar, uno de los hijos de Guzmán, que fue abatido en un estacionamiento de la ciudad.

En los años siguientes la violencia de los carteles se recrudeció y se esparció por muchos lugares del territorio mexicano. Entonces el Chapo se ganó la lealtad de la mayoría de sus competidores en Sinaloa, mientras que los Beltrán Leyva sellaron una alianza con el cartel de Los Zetas, hasta entonces enemigos proverbiales.

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Finalmente los Beltrán Leyva cayeron derrotados. La organización se disolvió tras la muerte de uno de los hermanos más poderosos del clan, Arturo, quien cayó en un tiroteo con la Marina mexicana, después de que la DEA, la organización estadounidense responsable de la lucha antidroga, informara a las fuerzas del orden mexicanas del paradero del criminal. Corría diciembre de 2009, apenas unos meses después de que otro hermano del clan, Carlos, que tenía un peso mucho menor en la familia, fuese igualmente arrestado.

El cartel se derrumbó entonces — y lo hizo muchas veces.

A día de hoy el cartel de los Beltrán Leyva se ha escindido en un puñado de grupos más bien pequeños, aunque increíblemente violentos, que luchan por hacerse con el control del estado de Guerrero. Entre estos se cuenta la organización Guerreros Unidos, el grupo al que se acusa de la desaparición de los 43 estudiantes de magisterio del colegio normal de Ayotzinapa, en septiembre de 2014.

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Alfredo Beltrán Leyva fue extraditado a Estados Unidos en noviembre de 2014, un mes después de que el último de los hermanos huidos con un peso específico en la familia, fuese arrestado mientras comía en un restaurante del pueblo colonial de San Miguel de Allende.

"La declaración de culpabilidad de Alfredo significa que habremos impartido justicia, pues él será juzgado como responsable de todos sus crímenes", ha escrito Loretta Lynch en su comunicado.

Del comunicado suscrito por la fiscal de Estados Unidos también se desprende que la confesión de Alfredo implica que las autoridades de Estados Unidos no volverán a utilizar evidencias que demuestren la participación del cartel en múltiples actos de violencia, ni en los sobornos de funcionarios públicos.

La declaración de culpabilidad de Leyva llega un mes después de que uno de los miembros de la cúpula del cartel — Edgar Valdez Villarreal aka La Barbie — también se declarara culpable frente a un tribunal estadounidense. Al igual que Alfredo, la Barbie también había sido extraditado desde su México natal.

Todo apunta a que las declaraciones de culpabilidad de Beltrán Leyva y Valdez Villarreal han sido pactadas de antemano. No cabe duda de que ambos disponen de suculentas informaciones sobre la actividad de el Chapo y de que los testimonios de sus dos paisanos podrían suponerle la ruina.

El Chapo se encuentra actualmente encarcelado en México, aunque cada vez cobra más peso la hipótesis de que podría ser igualmente extraditado a Estados Unidos.

Associated Press ha informado que entre los documentos con que contaría el tribunal existirían pruebas de múltiples reuniones sostenidas entre Alfredo y Guzmán para organizar el envío de enormes cargamentos. En uno de los documentos se informa que Beltrán Leyva se presentó a uno de los encuentros con un chaleco lleno de granadas.

Según la agencia de noticias EFE, Alfredo Beltrán habría rebajado los términos de su papel en la organización criminal durante su declaración de culpabilidad.

"Lo admito, señoría, ayudé a mi hermano Arturo y soy responsable de haber ayudado a mi hermano Arturo", habría dicho. "No, no fui ningún líder. Fui un mero miembro de la organización".

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