Imagen vía Youtube
Las autoridades tailandesas están investigando unas fosas comunes en cuyo interior yacían docenas de cuerpos. Estos corresponderían supuestamente a musulmanes Rohingya del oeste de Myanmar quienes llegaron a Tailandia para encontrar trabajo y escapar de la persecución religiosa.Informes locales señalaron la existencia de decenas de tumbas en una selva remota en el sur de Tailandia. Los medios de comunicación también informaron de decenas de ataúdes estrechos alineados que contenían restos humanos aún no identificados.Además, según Human Rights Watch, cerca de la zona se encontraron otros cuerpos a la intemperie, algunos de ellos cubiertos con sólo una manta, en la provincia de Songkhia."Por lo menos hay 30 tumbas identificadas. Hoy hemos exhumado cuatro cuerpos y seguiremos exhumando más", afirmó Anunchon a Reuters. Añadió que esta fosa común ha sido la primera de este tipo encontrada en Tailandia.Los primeros informes de la policía señalan que los cuerpos se asemejan a los de los musulmanes Rohingya quienes fueron víctimas de la trata de personas en la frontera tailandesa de Myanmar. Según la BBC, murieron a causa de enfermedades o hambre. Un superviviente fue localizado y posteriormente trasladado a un hospital."Durante mucho tiempo, la trata de personas en Tailandia ha estado fuera de control, algo que altos funcionarios han reconocido a Human Rights Watch y a otros", afirmó Brad Adams, director en Asia de Human Rights Watch. "El hallazgo de una fosa común en un campamento de tráfico de personas nos llega por sorpresa, por desgracia. La implicación de funcionarios tailandeses en la trata de personas significa que es necesaria una investigación independiente con el apoyo de la ONU para descubrir la verdad y hacer que los responsables rindan cuentas".Tailandia ya había sido criticada anteriormente por la comunidad internacional por no tomar medidas para frenar la trata de personas. El año pasado, el Departamento de Estado de EEUU incluyó a Tailandia en la 'lista negra' sobre trata de personas.Los musulmanes Rohingya fueron victimas de la violencia en Myanmar después de que los enfrentamientos con budistas se cobraran la vida de 200 personas, según la BBC. Otros conflictos han afectado a este grupo desde entonces.Sigue a Gillian Mohney en Twitter: @gillianmohney
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