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El cambio climático ayudó a estos dinosaurios gigantescos a colonizar Australia

Hace 90 millones de años, el universo era una selva plagada de monstruos vegetarianos, los dinosaurios. Un estudio ha descubierto ahora dos nuevas especies y la insaciable naturaleza migratoria de estos reptiles.
Arte conceptual inspirado en el Savannasaurus elliottorum basado en el espécimen tipo (Wade), y comparaciones con tiranosauros de todo el mundo. Imagen por Travis Tischler/ Museo Natural Historia Australia

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Este artículo fue publicado por primera vez en Motherboard.

Los mayores y más descomunales animales que pisaron jamás la faz de la Tierra fueron los titanosaurios, una familia de dinosaurios herbívoros de cuellos interminables que se esparcieron salvajemente por todo el globo terráqueo durante el Cretácico.

Algunos de ellos medían más de 35 metros desde la cabeza hasta la cola, y se estima que pesarían alrededor de 6.500 kilos; o sea, el equivalente a un avión comercial de tamaño intermedio. Si alguna vez alguien encarnó la sabiduría alimenticia que entraña comer verdura… Estos inconmensurables reptiles fueron los auténticos embajadores.

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Ahora, nuevas evidencias científicas publicadas por la revista Scientific Reports han anuncian el descubrimiento de dos extraordinarios especímenes de titanosaurios procedentes de la Winton Formation, en Queensland, Australia.

Si bien estos no serían los primeros titanosaurios encontrados en Australia — de hecho, los restos de titanosaurio han sido desenterrados de todos los continentes de la Tierra — lo cierto es que abren una fascinante ventana al conocimiento de la colonización australiana emprendida por los descomunales reptiles.

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El otro conjunto fósil pertenece a una especie antiguamente conocida como Diamantinasaurus matildae, e incluye los primeros restos craneales conocidos del saurópodo —el nombre científico con el que se conoce a estos icónicos dinosaurios de largo cuello— jamás encontrados en Australia.

Las calaveras de saurópodo son extraordinariamente raras en el registro fósil, especialmente debido a que sus cabezas eran pequeñas y delicadas en comparación con los rasgos más robustos de sus esqueletos, como las vértebras, los fémures o las fajas pélvicas.

Se considera que los saurópodos desprovistos de cabeza también habrían sido comunes, puesto que sus calaveras tendían a escindirse póstumamente de sus troncos, ya fuera por corrientes naturales o por la intervención de animales carroñeros.

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Los fósiles recuperados del Diamantinasaurus Matildae. Imagen por Travis Tischler/Museo Natural de Historia Australia

Los recién descubiertos titanosaurios habrían vivido hace 95 millones de años en el escenario que ahora ocupa la Winton Formation, en Queensland.

De acuerdo con los fósiles encontrados, el principal autor del estudio, Stephen Poropat, un especialista en saurópodos que trabaja en el museo natural de Historia de Australia, estima que los Savannasaurus y los Diamantinasaurus habrían medido alrededor de entre 12 y 16 metros de longitud. Y habrían pesado cerca de 2.000 kilos, por mucho que el Savanasaurus fuera mucho más ancho de caderas que el Diamantinasaurus.

Mientras que tales dimensiones pueden parecer bastante impresionantes para los estándares actuales, los paleontólogos han tenido que trazar un diagrama evolutivo. Y en esa escala los Diamantinasaurus serían animales de tamaño medio triando a pequeño", relata Poropat a Motherboard.

"Los Titanosaurus como el Dreadnoughtus, el Futalognkosaurus, el Argentinosaurus o el Puertasaurus eran mucho mayores, en algunos casos hasta 25 metros más largos, mientras que otros titanosauros, como elSaltasaurus, el Neuquensaurus y, especialmente, el Magyarosaurus y elLirainosaurus eran relativamente pequeños: no excederían los 10 metros de longitud".

El hecho de que el titanosauro de 10 metros de largo sea considerado pequeño habla de hasta qué punto el tamaño de estos animales se fue disparando durante su reinado en la Tierra.

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Pero más allá de la excitación inherente a haber descubierto fósiles tan bien preservados, Poropat y los coautores de estudio, apuntan a que el hallazgo informa, sobretodo, de los indiscriminados patrones migratorios de los titanosauros durante el Periodo Cretácico, especialmente en todo lo relativo a su llegada al único paleoambiente que les brindaba la Australia Mesozoica.

Los Titanosaurus eran exploradores extremadamente exitosos y sus restos han sido recuperados desde todos los rincones imaginables del planeta, incluida la Antártica. Pero en Australia, parece haberse perdido el recuento de fósiles hasta hace alrededor de 110 millones de años, lo que sugiere que lo mismo los reptiles no llegaran a desplazarse hasta que se dieron las condiciones geológicas adecuadas.

"A pesar de la ausencia de evidencias que delaten la presencia de saurópodos en los sedimentos descubiertos al sudeste de Australia, no podemos deducir solo en base a eso que jamás estuvieran. No hay que olvidar que no hay evidencias de la presencia de saurópodo alguno en paleolatitudes superiores a los 66 grados en ambos hemisferios", ha advertido Poropat.

En otras palabras, las regiones polares de la Tierra podrían haber resultado demasiado frías para estos animales. Sin embargo, de acuerdo con un nuevo estudio, existen persuasivas evidencias florales que sugieren que habría habido un periodo más cálido hace alrededor de 110 millones de años, el cual podría haber permitido a los titanosauros trasladarse de Sudamérica a Australia, vía la Antártica, que entonces conectaba a ambos continentes.

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La deriva continental. GIF: Algo/YouTube

"La misma Winton Formation, de la que los Savanassaurus y losDiamantinasaurus habrían procedido, está caracterizada por floras dominadas por las plantas angiospérmicas y coníferas, en la que los helechos serían la formación más abundante, y donde los ginkos, las colas de caballo y las benettitales también estarían presentes, aunque no serían tan abundantes", explica Poropat.

"Varios análisis consagrados a explorar los márgenes de las hojas y el crecimiento de la madera sugieren que la región de Winton era cálida y húmeda, y más bien estacional durante el Cenomaniense (el periodo que comprende a la época vivida desde hace 94 millones de años hasta hace 100 millones de años)".

Resulta bastante abrumador imaginarse a estos colosales animales galopando por la Antártica mientras el antiguo continente Gondwana se iba escindiendo lentamente bajo sus pies. Peropat ya se encuentra estudiando actualmente otros saurópodos australianos, como el Austraosaurus, que también habría irrumpido en el Cretáceo. Su exploración podría ayudar a esclarecer los patrones migratorios del titanosauro, además como su vínculo con la diáspora global del titanosauro durante el Mesozoico.

El principal autor del estudio asegura que "el siguiente paso a tomar consistiría en examinar a los saurópodos australianos ligeramente más viejos que los Savannasaurus y que losDiamantinasaurus", explica. "Yo tengo la esperanza que a través de una revisión exhaustiva del Austrosaurus y de otros especímenes de saurópodos el Cretácico más temprano, arroje algo más de luz sobre la procedencia delSavannasaurus y del Diamantinasaurus".

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