En imágenes: visitamos la pequeña 'ciudad' que alberga la Cumbre del Clima de París

Durante las próximas dos semanas, unas 40.000 personas — esencialmente autoridades gubernamentales, funcionarios públicos, representantes de la industria, y activistas medoiambientales — aterrizarán en París, sede de la XXI conferencia sobre el clima de la ONU.

Equipos negociadores de más de 190 países pasarán los próximos quince días encerrados en un gran centro de convenciones en Le Bourget, al norte de la capital francesa, tratando de llegar a un acuerdo global sobre cómo abordar el problema del cambio climático y mantener el calentamiento global por debajo de 2 grados centígrados.

Mientras los jefes de Estado y altos mandos gubernamentales dieron comienzo a la cumbre el lunes, VICE News recorrió las instalaciones, donde los líderes de planeta trabajarán para consensuar lo que podría llegar a ser una iniciativa climática histórica.

Decenas de autobuses de combustión limpia hacen fila fuera de la estación de tren de La Bourget, listos para transportar a los visitantes al centro de conferencias que hospeda las negociaciones de la ONU. Tras un corto viaje, los pasajeros descienden a un "bosque de banderas" — altos cilindros blancos adornados con las banderas de los países participantes.

La seguridad se ha incrementado notablemente antes de la conferencia, que acontece en medio del actual estado de emergencia declarado a raíz de los ataques terroristas del 13 de noviembre en los que murieron 130 personas en la capital francesa. Los diplomáticos, miembros de los equipos nacionales de negociación, y los grupos de vigilancia que asisten a la conferencia son desalentados activamente por los organizadores de la conferencia de la idea de llegar al lugar en automóvil, y muchas carreteras principales en París y sus alrededores han sido cerradas — incluida la circunvalación de París.

Los agentes de policía patrullan las calles en moto, hay oficiales en cada calle, y helicópteros sobrevuelan el área que rodea el sitio de la conferencia.

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El fin de semana, el ministro del Interior de Francia, Bernard Cazeneuve, anunció que 24 activistas ambientales fueron puestos bajo arresto domiciliario antes de la cumbre. Los activistas, expresó, habían manifestado su "deseo de hacer alarde de los principios del estado de emergencia".

Otros activistas se han visto impedidos de viajar a Francia y el gobierno galo también ha introducido medidas que limitan — y en algunos casos, prohiben —grandes concentraciones públicas, incluyendo una marcha masiva por el clima que estaba prevista para el fin de semana pasado.

Los asistentes al centro de conferencias deben someterse a severos controles de seguridad y pasar a través de detectores de metales.

Luego se transita hacia la principal arteria del centro de convenciones — llamada Los Campos Elíseos, como de la avenida más famosa de París. Diseminados por todo el centro se encuentran 32 salas de negociaciones, un centro de prensa con capacidad para 3.000 personas y oficinas para los organizadores y delegados.

A ambos lados de la avenida se encuentran enormes almacenes, cada uno dedicado a una función específica. El centro de negociaciones se asemeja a una pequeña ciudad, y cuenta con una panadería, un banco, y su propia torre Eiffel en miniatura.

Una oficina de correos, seis restaurantes, una sala de oración, 45 fuentes de agua, un quiosco de periódicos y revistas, una oficina de objetos perdidos, una enfermería, e incluso una tienda de suministros de oficina son sólo algunos de los servicios que se encuentran en el sitio de la conferencia.

A la izquierda de los Campos Elíseos, otros dos grandes almacenes albergan stands, pabellones, y oficinas de las diferentes delegaciones que asistieron a la cumbre. India cuenta con un soporte de alta tecnología que ofrece una impresionante fuente de agua, mientras que la esquina alemana cuenta con un bar. El stand de Indonesia está cubierto de flores. Al lado de los stands y pabellones hay habitaciones privadas donde los negociadores de cada país pueden trabajar, o tomar un descanso.

En imágenes: enfrentamientos entre anarquistas y la policía durante la Cumbre del Clima en París. Ver aquí.

Los diversos stands y pabellones también sirven como un escaparate para empresas y negocios. El Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo — que incluye a países como Arabia Saudí y Kuwait — exhibe varias empresas "sostenibles", incluyendo la fabricante petroquímica Sabic, una compañía pública con sede en Riad, Arabia Saudí. "Queremos mostrar que nosotros también estamos ayudando a reducir las emisiones de CO2 gracias a nuestra tecnología", dice Aline Stanworth, director de comunicaciones de Sabic, quienes han desarrollado recientemente envases de leche ecológicos.

Representantes de la sociedad civil — u "observadores" en la jerga de la ONU — están alojados en otro almacén, al otro lado de los stands y pabellones. Entre ellos se encuentran la Alianza del Clima, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, y Brahma Kumaris, un movimiento espiritual que aboga para una sostenible "agricultura del yoga."

Activistas denuncian exhaustivos controles fronterizos por la Cumbre del Clima de París. Leer más aquí.

El lugar es un laberinto de habitaciones y salas de conferencia, que alojarán a varios cientos de charlas durante las próximas dos semanas. Pero la mayor parte de la conversaciones se llevará a cabo a puertas cerradas, lejos de los periodistas y el público, en las numerosas salas VIP y salas de reuniones reservadas para los negociadores.

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Imágenes por Etienne Rouillon: @rouillonetienne

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