Evo Morales perdió el referéndum para ser reelegido, ahora quiere un 'segundo tiempo'

El Movimiento al Socialismo (MAS), partido del presidente Evo Morales, quiere alargar el referéndum que perdieron hace tres meses para intentar reelegir a su líder y llevar la votación a un "segundo tiempo", porque acusan que hubo juego sucio.

El 21 de febrero pasado se organizó un referendo constitucional en el que el 51,3 por ciento de los participantes votaron a favor de "no" cambiar la Constitución, y así impedir la cuarta reelección consecutiva del presidente boliviano.

Para tratar de revertir ese marcador, el MAS argumenta que el resultado es producto de las "mentiras" de la prensa y de una campaña negativa contra el actual mandatario, por lo que ha comenzado a gestionar una convocatoria para un nueva consulta popular en 2017 o 2018.

"Como todos dicen: [este] es el primer tiempo y ahora viene el segundo tiempo. En el segundo tiempo veremos quién es quién", anunció el exlíder cocalero, conocido aficionado al futbol, en un acto de entrega de obras realizado en la provincia Oropeza de Chuquisaca.

En aquellos comicios de febrero, Morales — quien asumió como presidente en 2006 — sufrió su primera derrota electoral en diez años: la votación fue tan cerrada que al colegio electoral le tomó dos días dar el veredicto: el presidente perdió por un margen de apenas 2,6 por ciento.

Desencajado, hasta el tercer día Morales reconoció su derrota, aunque advirtió que habían perdido una batalla, "pero no la guerra".

Los resultados de ese referendum mostraron a un país dividido: las áreas rurales votaron a favor de su proyecto presidencial y en las zonas urbanas los votantes le dieron la espalda. También partió al país generacionalmente: el voto joven se fue al "no" y el de la tercera edad al "sí".

El nuevo anuncio de Evo ha desatado reacciones previsiblemente polarizantes: el expresidente Jorge Quiroga explicó que no puede haber un referéndum sobre el mismo tema, coincidiendo con lo que dijo el abogado constitucionalista William Bascopéz al periódico boliviano El Diario: "el resultado de la consulta realizada el pasado 21 de febrero convirtió el tema, constitucionalmente, en 'cosa juzgada', es decir, que no se cambia".

Por el contrario, algunos senadores como René Joaquino — cercano a Morales — han afirmado que la Constitución no limita el número de consultas que pueden hacerse y con él está de acuerdo el procurador general del Estado, Héctor Arce.

"En ningún sentido, la Constitución Política del Estado limita la cantidad de reformas constitucionales que se puedan hacer en uno, dos, tres o cuatro periodos constitucionales", afirmó el procurador.

Otros parecen aceptar tácitamente que el presidente boliviano tendrá su "segundo tiempo", como Samuel Doria, tres veces candidato presidencial de la oposición, quien devolvió los dichos futboleros a Morales: "perderá por goleada".

Uno de los argumentos más repetidos para que Morales intente reelegirse es que a principios de este año se reveló que era padre de un hijo no reconocido con una ejecutiva de la firma china CAMC, quien había recibido contratos del gobierno. Sin embargo, en días recientes, un juez determinó que el supuesto niño no existía.

Los partidarios de Morales aseguran que ese tipo de noticias afectaron de manera considerable la figura del presidente, por lo cual el referéndum no fue equitativo. Ahora con todo el aparato propagandístico del Estado planean nivelar la situación, si es que se aprueba el nuevo referéndum.

David Ramos, diputado del MAS, argumentó que el resultado del referéndum fue un robo al pueblo, ya que la oposición se aprovechó del escándalo del supuesto tráfico de influencias respecto al presunto hijo de Morales, y utilizó el caso para atacarlo sobre la base de la mentira y la calumnia.

En caso de que el plan de Morales no se concrete, y no pueda reelegirse, saldrá de la presidencia el 22 de enero de 2020, el día que cumpliría 14 años como jefe de Estado.

_Sigue a VICE News En Español en Twitter: @VICENewsEs_