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VICE World News

Los manifestantes de Beirut dan un ultimátum al gobierno libanés

Los manifestantes de Beirut dieron al gobierno un ultimátum de 72 horas que finaliza hoy para alcanzar una solución estable en la actual “crisis de la basura” que afecta a la capital del país.
Activistas ondean banderas libanesas y llevan una pancarta con las palabras árabes: "Secularismo, democracia y justicia social" en la ciudad de Beirut, Líbano, 29 de agosto 2015. (Nabil Mounzer/EPA)

Los manifestantes de Beirut dieron al gobierno un ultimátum de 72 horas que finaliza hoy para alcanzar una solución estable en la actual "crisis de la basura" que afecta a la capital del país. Un plazo que, de ser incumplido, aseguraron, provocará una escalada de malestar y tensión social.

El ultimátum llegó el pasado sábado cuando 50.000 personas congregadas en la plaza de Martyr hicieron, según los testigos presenciales, una gran demostración de fuerza bailando al ritmo de la música en vivo y ondeando banderas del líbano. Rasha Halabi, miembro de la organización civil "YouStink" [Apesta], que se formó como reacción a los montones de basura en proceso de descomposición acumulados en los entornos de Beirut, habló entre la multitud y exigió la dimisión del ministro de Medio Ambiente, Muhammed El-Machnou.

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Cuando empezó a anochecer, el gentío congregado en la plaza de Martyr empezó a dispersarse. Sobre las 10 pm, los reportes apuntaban a la expulsión de los manifestantes de la plaza por parte de la policía antidisturbios que habría golpeado a la multitud con el objetivo de despejar la zona y habría golpeado y habría realizado diversas detenciones.

Riot police just chased us out of Riad Al Solh. Started beating protestors- both men and women. — Nour Samaha (@Nour_Samaha)August 29, 2015

"La policía antidisturbios está fuera del Riad Al Solh. Ha comenzado a golpear a los manifestantes - hombres y mujeres".

En los alrededores de la plaza Riad al-Sohl, los manifestantes más radicales continuaron su protesta durante la noche reunidos entorno al Grand Serail -el edificio del gobierno- para instar a la revolución cantando "Thawra! Thawra! Thawra! [Rebelión]. "Aproximadamente, una docena de manifestantes, con sus rostros escondidos tras pañuelos enrollados, escalaron por los alambres punzantes que rodean el edificio y luego utilizaron material pirotécnico y lanzaron piedras a la policía.

Los encontronazos entre la policía y los manifestantes fueron tibios respecto de los que tuvieron lugar la semana pasada, cuando las imágenes y los vídeos de las protestas mostraron como la policía antidisturbios lanzaba gas, pelotas de goma, y utilizaba cañones de agua y munición de guerra contra los manifestantes causando la muerte de uno de ellos y heridas a muchos de los allí congregados.

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En imágenes: el problema de la acumulación masiva de basura en Beirut. Leer más aquí.

La agitación social se extendió en Beirut como consecuencia de la reacción de desaprobación de los ciudadanos respecto de lo que describen como el fracaso del gobierno en la provisión un servicio de recolección de la basura. Una realidad que ha derivado en un rechazo generalizado al gobierno de Líbano, criticado por ser ineficaz y disfuncional, sobre todo, por su negligente gestión de las infraestructuras nacionales.

Dancing inside the wire in front of Grand Serail — Jeff Neumann (@jeff_neumann)August 29, 2015

"Danzando delante de la alambrada del Gran Serail".

Líbano está sumido en la cronificación de apagones apagones eléctricos que afectan a una gran parte de la población. De hecho, 15 años después del final de la Guerra Civil que asoló al país, el gobierno aún no ha podido encontrar una solución estable para garantizar el provisionamiento de electricidad. Una realidad que obliga a muchos a abastecerse mediante generadores de uso particular que resultan extremadamente caros.

En 2010, el ministro de Economía y Comercio estimó que la mejora de la infraestructura más básica como la electricidad, el agua, las comunicaciones y las carreteras, significaría una inversión mínima de unos 20 millones de dólares.

"Por primera vez hemos conseguido despertar y romper el viejo sistema que nos mantenía encadenados", aseguró Wissam Saliba, un manifestante de 26 años a la cadena de televisión al-Jazeera. "Estamos luchando por nuestros derechos humanos más básicos", añadió. El tiempo se agota para el gobierno. La continuación de las protestas en las próximas semanas depende de si el gobierno es capaz de ofrecer una solución aceptable para el frustrado y ahora furioso pueblo libanés.

Jeff Neumann ha contribuido en esta información.