FYI.

This story is over 5 years old.

VICE World News

‘No está muerto’ dice el padre de uno de los 43 estudiantes tras identificar un hueso

Diez meses después de que el cadáver del primero de los 43 estudiantes desaparecidos fuera identificado, la fiscal general de México, asegura que ya se ha identificado positivamente al segundo: se trata de Jhosivani Guerrero de la Cruz, de 20 años.
Imagen vía EPA

"Esta no es la primera vez que me dicen que está muerto", dice Margarito Guerrero. Es el padre del segundo cadáver identificado entre los restos de los 43 estudiantes desaparecidos en México. "Sé que no lo está".

A Guerrero se le quiebra la voz mientras habla por teléfono con VICE News. Han pasado apenas unos minutos desde que la fiscal general de México, Arely Gómez ha comunicado su último y luctuoso descubrimiento. Ayer, los forenses austriacos identificaron un hueso del cadáver de su hijo, Jhosivani Guerrero de la Cruz, de 20 años.

Publicidad

El anuncio del gobierno se produce casi un año después de la desaparición de 43 jóvenes del colegio de maestros de Ayotzinapa, al sur del estado de Guerrero. Los jóvenes fueron aniquilados entre la policía y una banda criminal de Iguala, en un caso que ha dejado en evidencia al administración del presidente del país, Enrique Peña Nieto.

¿Es posible que las autoridades mexicanas enfrenten cargos por el caso Ayotzinapa? Leer más aquí. 

El gobierno de México asegura ahora que los cadáveres de los estudiantes fueron llevados a un vertedero de una ciudad vecina. Allí fueron incinerados bajo una fuego que se prolongó durante medio día. La confesión enseguida despertó las dudas y, a principios de este mes, un comité de expertos ha concluido que la teoría de la incineración en masa de los cuerpos es científicamente imposible.

Guerrero de la Cruz provenía de una familia rural, como la mayoría de los desaparecidos. Perseguía formarse como profesor en la escuela de educación normal de Ayotzinapa. Ahora se ha convertido en el segundo de los 43 estudiantes desaparecidos formalmente identificado en México. El primero fue Alexander Mora Venancio, que tenía 19 años. Las autoridades enviaron los 17 fragmentos descubiertos en bolsas de basura a un laboratorio de la Universidad de Innsbruck en Austria. Tenían la esperanza de que los forenses austríacos pudiesen identificar los restos, que fueron arrojados a un río en Cocula, localidad cercana al lugar de la tragedia.

Publicidad

La muerte de Mora fue corroborada por un grupo de forenses argentinos, que también está investigando el caso. Sin embargo, el laboratorio afirmó que era incapaz de determinar dónde y cómo habrían ocurrido los asesinatos de los estudiantes. El ex fiscal general de México, Jesús Murillo Karam — que perdió su trabajo después de que estallase el caso — describió el escenario donde se encontraron las bolsas de basuras como "la histórica verdad" del destino de los 43 estudiantes.

 Los familiares de los desaparecidos se han estado manifestado durante meses. (Foto de Daniel Hernandez/VICE News)

Margarito, el padre del segundo desaparecido identificado, es un campesino que trabaja en el vecindario de Omeapa, cerca de la escuela de educación normal de Ayotzinapa. La policía local le pidió que asistiera a la morgue tras los ataques acaecidos los pasados 26 y 27 del mes de septiembre del año pasado. Los agentes le contactaron porque algunos testigos creían que su hijo podría estar entre los cadáveres de tres estudiantes descubiertos la noche del 26.

Margarito no quiso confirmar la muerte de su hijo. "Hasta que yo no vea su cuerpo no será así", me dijo.

La actual fiscal general, fotografiada arriba, declaró a los periodistas que los científicos de Innsbruck emplearon tres métodos de referencias cruzadas de las 17 muestras de ADN mitocondrial recibidas.

"La Oficina del Fiscal General (PGR) no descansará hasta identificar y poner a disposición de la justicia a todos los involucrados y probables responsables", declaró Gómez. La fiscal no aceptó que se le hiciesen preguntas.

Publicidad

Lo que no ha quedado claro es porque los forenses austriacos han tardado 10 meses más en identificar el segundo cadáver. Los familiares de los desaparecidos lideraron manifestaciones durante meses para exigir que las autoridades investigaran la presunta conexión entre las desapariciones y la base militar de Iguala.

El gobierno de México negó en su día el permiso para entrevistar los miembros del 27 batallón de infantería del ejército mexicano a una Comisión Interamericana de Derechos Humanos (IACHR). La comisión pretendía investigar las denuncias de los familiares.

Esta semana el Grupo de Trabajo de Desapariciones Forzadas o Involuntarias de la ONU (UNWGEID), imploró al gobierno mexicano una investigación pormenorizada de las grotescas e inexactas conclusiones emitidas por el gobierno mexicano. La petición es una respuesta al incriminatorio informe de la IACHR.

Ariel Dulitzky, uno de los miembros del grupo de trabajo compareció en rueda de prensa en Ginebra ayer miércoles. El investigador declaró que que el gobierno mexicano ha cooperado mucho más "en las últimas semanas", en lo que supone un evidente cambio de actitud.

"Queremos no solo retórica, sino pasos concretos", declaró Dulitzky.

Mira el documental de VICE News'Los 43 que faltan: estudiantes desaparecidos en México'

Sigue a Melissa del Pozo en Twitter: @melissadps