FYI.

This story is over 5 years old.

VICE World News

El nuevo tipo de bomba que se está usando en Siria es una pesadilla humanitaria

Varios ataques mortales indican que el presidente Bashar al-Assad estaría usando bombas de vacío en Siria para pulverizar bloques de apartamentos enteros y aterrorizar a la población civil.
Cuerpos de sirios muertos tras el bombardeo con bombas de vacío del régimen de Assad en Douma, un suburbio situado al noreste de Damasco el pasado 16 de agosto. (Imagen por Motasem Rashed/Anadolu Agency/Getty Images)

Los cazas del ejército de Siria alcanzaron un mercado en Douma, un suburbio situado al noreste de Damasco el pasado 16 de agosto. Murieron casi 100 personas. Algunas informaciones relacionan el devastador ataque con el uso de una bomba de dosificación volumétrica, también conocida como bomba de vacío.

En su condena al ataque, Staffan de Mistura, destacado especial de Naciones Unidas en Siria, aludió a la posibilidad de que las fuerzas aéreas sirias hubiesen empleado una bomba de vacío. De Mistura dijo que "los ataques con bombas aéreas indiscriminadas en áreas civiles, como las bombas de vacío, están prohibidos por la ley internacional".

Publicidad

Pese a todo, los investigadores y los defensores de los derechos humanos que observan desde la distancia, son incapaces de confirmar o de investigar adecuadamente si tal es el caso.

"Sospechamos que podría haber sido usada", explicó a VICE News Mary Wareham, la directora de la división de Armas en la organización Human Rights Watch (HRW).

En conflictos como el de Siria los investigadores y los grupos pro derechos humanos se enfrentan a una batalla cuesta arriba para calibrar las particularidades de semejante ataque. La inexistencia de imágenes de vídeo y la imposibilidad de acceder a la zona en que se produjo la detonación ha dejado a los investigadores con muy poco que analizar. Las obstrucciones a la investigación y a la posibilidad de llevarla a cabo, dejan claro que la información sobre armas volumétricas en la guerra de Siria está fuera de todo alcance.

Las bombas del régimen sirio matan a decenas de personas en Damasco por segunda semana. Leer más aquí.

Las armas volumétricas son una familia de las municiones más conocidas como los subtipos termobáricos o los explosivos aire-combustible (FAE en inglés), a las que se refiere normalmente como bombas de vacío o armas de "calor y presión". Las diferencias entre las bombas termobáricas y los explosivos de aire y combustible son más bien poco conocidas. Sin embargo, los efectos fundamentales en las personas heridas o asesinadas por estas armas, son muy parecidos.

Publicidad

"Si eres un civil a pie de calle, en un mercado, por ejemplo, y la bomba detona, los efectos serán bastante similares", declaró a VICE News Robert Perkins, un investigador de armas de la organización Acción contra la Violencia Armada. "La onda expansiva es increíblemente destructora. Eso es lo que caracteriza a todo este tipo de bombas".

La forma en que funcionan las bombas volumétricas consiste en liberar un elemento explosivo o combustible, que genera una nube de aerosol. Acto seguido el explosivo de la bomba activa la nube de aerosol, que desata una onda expansiva enrome y provoca la elevación de las temperaturas.

La onda expansiva provocada por las armas volumétricas es más duradera que el estallido de los explosivos convencionales; es una diferencia comparable a la que distingue el bramido de una explosión con el ruido de un golpe seco. Normalmente, los explosivos convencionales estallan y gran parte de su efecto se genera a partir de la metralla que escupen. La metralla es una nube de pequeños proyectiles letales que salen disparados a una velocidad endiablada. En cambio, las armas volumétricas canalizan sus efectos a través del calor y de la presión extrema durante periodos de tiempo relativamente largos, y son extremadamente efectivas cuando se arrojan contra cierto tipo de objetivos "blandos", como campos de minas antipersona o contra aviones aparcados en espacios abiertos.

Publicidad

Estados Unidos necesita culpar a alguien de los ataques con armas químicas en Siria. Leer más aquí.

De manera alternativa, las armas volumétricas funcionan bien contra objetivos ocultos, como aquellos que están ocultos en cuevas o en bunkers. Normalmente la estructura escurridiza y los recovecos de los túneles o de las construcciones ocultas protegen a la gente de la metralla. Sin embargo la nube de aerosol puede penetrar hasta determinadas distancias, antes de detonar, de manera que las paredes que rebasa se convierten en el canal a través del cual se consuma la explosión.

Un informe de Human Rights Watch sobre armas volumétricas empleado en Rusia en el año 2000 describe el armamento como "propenso al uso indiscriminado", y como muy adecuado para provocar altos niveles de bajas entre los civiles cuando se lanza contra un núcleo urbano.

"Las bombas de aire-combustible constituyen otra manera de aniquilar a gente de un modo que deja sus cuerpos hechos jirones y que es horrible de presenciar", relató a VICE News el doctor Theodor Postol, físico y experto en misiles del Instituto Tecnológico de Massachusets (MIT). "Así que dirigir semejantes ataques contra civiles inocentes es una forma de sembrar todavía más el horror".

Al igual que las bombas de barril o que el gas sarín, el objetivo de quienes usan las bombas de vacío va más allá de las destrucción de bloques de viviendas y de sus desafortunados residentes civiles. El objetivo último de un ataque de esta naturaleza no es otro que aterrorizar, que sembrar el pánico.

Publicidad

Mira el documental de VICE News, Yihadistas contra el régimen de Assad: el avance rebelde en Siria:

Mark Hiznay, experto investigador de la división de armas de HRW señala que existen dos tipos de lesiones que son grandes indicadoras del uso de armamento volumétrico: quemaduras horrorosas entre aquellas que han estado más cerca del estallido y un elevado número de heridas devastadoras.

Debido a que las armas volumétricas despiden el explosivo en una nube antes de explosionar, durante su detonación consumen enormes cantidades de oxígeno atmosférico. Y si bien no absorben el oxígeno cuando operan desde la distancia, el efecto local es suficientemente pronunciado como para generar un vacío parcial en un espacio cerrado, como en un búnker, un sótano o en un apartamento, matando a sus ocupantes de un modo que jamás conseguiría una bomba de detonación convencional.

Destruyen "edificios y pulmones de la misma manera", advierte Perkins. Más allá de las características del año infligido en humanos, las bombas se caracterizan también por la ausencia de los enormes socavones o cráteres que generan normalmente las explosiones de tamaño similar.

Las propiedades aniquiladores de este tipo de munición, y su capacidad de generar una destrucción masiva a gran escala y el exterminio de civiles, son su mayor atractivo para aquellos que desean emplearlas. Las armas volumétricas fueron utilizadas, ante el clamor internacional, por Rusia durante la guerra con Chechenia, entre finales de los 90 y principios de siglo. Y parece que regresan. Las armas termobáricas y los explosivos aire-combustible han irrumpido en el conflicto de Ucrania. Además el lanzallamas T0S-1, utilizado por primera vez por Rusia en Afganistán en 1989, reapareció el año pasado en Irak.

Publicidad

EEUU y Rusia incrementan la venta de armas a Oriente Medio en su afán por enriquecerse. Leer más aquí.

Saber si Siria ha acudido a estas armas o no, dependerá de la participación de los especialistas necesarios para determinar su alcance exacto. Aquellos que han presenciado sobre el terreno el caos y la violencia de los bombardeos aéreos se refieren a menudo a términos como "bombas de vacío", para expresar la formidable escala a la que se está destruyendo el país entero.

"Es un fenómeno parecido al de la gente que, a veces, habla de las bombas de barril", comentó Perkins. "A menudo, sobre el terreno, la gente se expresa en términos que creen que expresan la dimensión de lo que están presenciando".

Es sabido que las fuerzas del presidente sirio Bashar al-Assad han empleado armamento volumétrico con anterioridad, en ocasiones separadas. Algunas han sido comprobadas y otras no han llegado nunca a serlo.

En 2012 Acción contra la Violencia Armada denunció un bombardeo aéreo en Azaz que mató a más de 40 civiles. La organización clamó su inequívoca vinculación con explosivos de aire-combustible de 500 kilos origen ruso, conocido como ODAB 500 PM. El 29 de septiembre de 2013 una arma volumétrica fue arrojada sobre la escuela de educación secundaria Ibn Tufail, en Raqqa. Murieron 14 personas, entre ellas 12 colegiales. Los traumatismos y las heridas padecidos por los muertos — quemaduras en la córnea y lesiones que evidenciaban que habían sido arrojados contra la pared por la onda expansiva — sugerían el uso de un arma volumétrica.

Publicidad

Lo que sigue sin estar claro es en qué momento Siria se aprovisionó de las bombas ODAB y cuántas de ellas le quedan por utilizar. Tal esa es otra de las grandes limitaciones de la comunidad internacional a la hora de localizar los conflictos y uno de los grandes quebraderos de cabeza de las organizaciones no gubernamentales que supervisan las acciones de los gobiernos.

"La capacidad de los investigadores y de los activistas pro derechos humanos para monitorizar (o incluso disminuir el uso de armas que puedan aniquilar a enormes cantidades de civiles) dependerá de la capacidad que tengan para comprobar su implementación y sus efectos. Sin embargo, la evidencia del aumento en el uso de armamento volumétrico ha demostrado ser, hasta la fecha, muy difícil de probar, y las considerables exigencias de la medicina forense para evaluarla, significan que solo se pueden confirmar a ciencia cierta unos pocos de los horribles episodios. Los investigadores y las organizaciones que trabajan por los derechos humanos disponen de pocas oportunidades para denunciar públicamente su implementación en determinados contextos, como antiética.

Las armas volumétricas podrían ser lo más parecido a la mascota de la lucha en Siria: es completamente brutal, salvajemente indiscriminada y capaz de absorber la claridad moral de una tragedia.

Sigue a Torie Rose DeGhett en Twitter:@trdeghett