FYI.

This story is over 5 years old.

VICE World News

Las protestas se intensifican en Turquía, mientras el gobierno bombardea la región kurda

La policía disparó gases lacrimógenos y balas de goma para disuadir a las multitudes concentradas en Estambul y Diyarbakir. Éstas protestaron ayer contra los enfrentamientos entre las fuerzas del gobierno y el PKK quienes suman ya 110 bajas en 6 días.
Photo de Sedat Suna/EPA
Síguenos en Facebook para saber qué pasa en el mundo.

Los enfrentamientos armados continuaron extendiéndose ayer por el sudeste turco, donde una operación liderada por las fuerzas turcas se ha cobrado ya las muertes de 110 militantes kurdos en seis días de lucha.

Las manifestaciones estallaron en Estambul y Diyarbakir, la ciudad más grande del sudeste turco, donde centenares de personas se concentraron para protestar contra la violencia del gobierno de Erdogan. La policía disparó gases lacrimógenos y balas de goma para disolver a la multitud.

Publicidad

Los enfrentamientos más encarnizados se vivieron en los pueblos de Cizre y Silopi, cerca de las fronteras con Siria e Irak, que llevan una semana sumidas bajo el toque de queda. Las aldeas de Nusaybin y Dargecit, en la provincia fronteriza de Mardin, y el barrio Sur de Diyarbakir, también han sido escenarios de la violencia más feroz

Footage from Cizre, southeastern — John Beck (@JM_Beck)December 20, 2015

Imágenes de Cizre, al sudeste de Turquía, donde los feroces enfrentamientos continúan. Los jefes de seguridad han ordenado el toque de queda.

More Cizre footage. Black smoke rising over the town after fighting as security forces impose curfew. — John Beck (@JM_Beck)December 20, 2015

Más imágenes de Cizre. El humo negro se despliega sobre la aldea tras los enfrentamientos, mientras las fuerzas de seguridad han decidido proclamar el toque de queda.

A pesar de estar asentados en zonas del interior, los militantes del proscrito Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), han cambiado su estrategia en los últimos años. Ahora muchos de ellos se reparten por las ciudades y los pueblos del sudeste, en los que han cavado trincheras y han desplegado barricadas callejeras para mantener a raya a las fuerzas de seguridad.

Fuentes vinculadas a las fuerzas de seguridad y a los vecinos aseguran que, al menos, 300 casas de Cizre han quedado seriamente dañadas por los enfrentamientos, y que varios morteros yacen incrustados en muchas de ellas sin haber llegado siquiera a detonar.

Publicidad

Muchos barrios de Silopi se han quedado desprovistos de suministro eléctrico después de que los transformadores fuesen alcanzados deliberadamente por los bombardeos de la administración Erdogan. Según los vecinos, el agua potable y la comida son cada vez más escasos.

RIP Sirnak :( — Jake Hanrahan (@Jake_Hanrahan)December 20, 2015

El alto el fuego entre Turquía y el PKK fue dinamitado durante el pasado mes de julio tras dos años de pacifismo. El fracaso de las conversaciones de paz ha revivido las heridas del devastador conflicto que lleva tres décadas arruinando los asentamientos kurdos en el sudeste del país.

"No nos cansaremos", ha declarado el primer ministro Ahmet Davutoglu en un discurso dirigido a los partidarios del gobierno que representa. "Batallaremos día y noche hasta que todas las montañas, las ciudades, los barrios y los distritos de este país estén limpios de guaridas terroristas".

Las últimas embestidas dirigidas por las fuerzas del gobierno han sido las más agresivas desde que se derrumbara el alto el fuego. Según informan los medios de comunicación locales, estas fueron lideradas por más de 10.000 policías y por los tanques del ejército.

Turquía amenaza con encarcelar a dos niños por arrancar posters electorales de Erdogan. Leer más aquí. 

Los tanques destinados en las colinas de los alrededores de Cizre han bombardeado múltiples objetivos en el interior de la ciudad, mientras que un convoy formado por más de 30 vehículos armados ha irrumpido por varios barrios distintos.

Publicidad

Cientos de personas de Estambul, Diyarbakir y de la ciudad de Van, al este del país, salieron a las calles para protestar contra los ataques padecidos y contra la declaración del toque de queda.

La policía ha utilizado gases lacrimógenos, cañones de agua y balas de goma para dispersar a una multitud que coreaba el "Larga vida al Kurdistán", en la plaza Taksim de Estambul, según han informado miembros de la agencia Reuters. La policía detuvo además a decenas de personas por distintas ciudades del país.

Las fuerzas de seguridad han informado de la muerte de un soldado turco en los enfrentamientos del sábado en Cizre, como consecuencia de las heridas recibidas. Igualmente, un cartero que trabajaba para el servicio postal nacional también ha muerto después de que los militantes del PKK embistieran su vehículo en la autovía de Sirnak.

La insurgencia del PKK se proclamó en 1984. Desde entonces la formación kurda ha sido calificada de grupo terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea.

Sigue a VICE News En Español en Twitter: @VICENewsEs