La revuelta de los empresarios en México: queman un auto para que el gobierno les pague

En México, es usual que campesinos, maestros y estudiantes bloqueen las calles para presionar al gobierno. Lo que no es usual es que esas demostraciones las hagan los empresarios. Y menos que lo hagan calcinando automóviles.

Cansados de no recibir los pagos correspondientes por los servicios que han prestado, empresarios de Veracruz, un estado del Golfo de México, radicalizaron sus protestas y prendieron fuego a un vehículo para presionar al gobierno de esa entidad para que les pague el dinero que les debe.

El vehículo fue incendiado el pasado miércoles por la noche afuera de las instalaciones de la Secretaría de Finanzas, institución responsable de pagar a la empresas que contrata el gobierno. Sin embargo, las acciones de presión continúan: en Xalapa, la capital del estado, hay calles bloqueadas con tractores y edificios públicos tomados por los inconformes.

La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA) en la entidad, señaló que el gobierno de Flavino Ríos les debe más de 100 millones de pesos [unos cinco millones de dólares] a las empresas que integran esa Cámara.

Las imágenes de la pira, el humo, la policía y los bomberos angustiados por apagar el incendio en la calle, podrían repetirse todos los días, si el gobierno no pone una fecha límite para saldar sus deudas, amagaron los hombres de negocios.

VICE News conversó con Antonio Pino, líder de los empresarios xalapeños y rostro visible de esta protesta sui-géneris, quien dijo que el gremio está "en pie de guerra" y "en choque" con la actual administración bajo el mando de gobernador interino, luego de la renuncia, orden de aprehensión y fuga del exmandatario local priísta Javier Duarte, acusado de desfalcar las arcas públicas.

"El vehículo nos lo donó un empresario bastante desesperado. Lo quemamos para llamar la atención y que nos volteen a ver. Son 14 empresas en peligro de desaparecer, con adeudos desde hace tres años. Millones que nos deben. Estamos muy desesperados", admitió Antonio.

La quema se ideó una semana antes y fue consensuada entre 30 empresarios, quienes han recibido el apoyo por parte de grupos sociales con los que no suelen coincidir, como los maestros rurales. En cambio, han sido criticados por otros colegas empresarios por considerarlos como radicales.

"No somos vándalos, somos empresarios. Gente honesta, trabajadora, generadora de empleos y riqueza. Necesitamos que el presidente nos voltee a ver", señaló Antonio, un empresario de la industria de la publicidad y de la comida, quien acumula facturas sin pagar por parte del gobierno estatal.

"Esta fue la única manera que encontramos para que el presidente nos ayude, nos voltee a ver. Si a los compañeros empresarios no les gustan nuestras protestas, está bien. Pero yo les hago la pregunta ¿qué están haciendo ellos? ¿Se van a quedar con los brazos cruzados hasta que despidan a sus empleados? No es justo".

Antonio aseguró que si las próximas semanas no hay pago para ellos, 200 familias se quedarán sin ingresos. Gente que invirtió su patrimonio en industrias de construcción y servicios, principalmente.

"Todo el estado está en bancarrota. Ofrecemos una disculpa pública a los xalapeños, se cerraron vialidades muy importantes para la capital y quedó totalmente estrangulada la ciudad, pero ojalá y se nos entienda… ya no podemos más, vamos a perder todo".

Pero el adeudo a los empresarios no es el único problema fiscal del gobierno veracruzano. El pasado 16 de noviembre, personal médico y administrativo de varios hospitales del estado pararon labores para exigir el pago de sus salarios e indemnizaciones. De acuerdo con medios locales, fueron cerca de 20.000 trabajadores del sector salud los que pararon 59 hospitales de la entidad.

En los hospitales de Veracruz sólo se atendían emergencias como partos, o accidentes que requerían una intervención urgente. Al día siguiente, se sumaron trabajadores de la Contraloría del Estado, de la Dirección de Prevención y Readaptación Social, de la Secretaría de Turismo, de Protección Civil y la Comisión de Agua a las protestas debido al incumplimiento en el pago de sus salarios. Algunos señalaron que no habían recibido su sueldo en un mes y medio.

De la misma forma, policías de tránsito protestaron por la falta de pagos. Asimismo, padres de familia y académicos Benemérita Escuela Normal Veracruzana protestaron para exigir el pago de las becas que les deben y otros recursos que les fueron asignados pero que no les han dado. El paro terminó paulatinamente cuando el gobierno estatal empezó a pagar poco a poco lo que debía.

Javier Duarte, exgobernador de Veracruz, buscado por las autoridades mexicanas por el delito de lavado de dinero y delincuencia organizada, dejó una deuda en el estado de 64 mil 580 millones de pesos [unos 3 mil 200 millones de dólares], al momento de pedir licencia del cargo en octubre pasado, de acuerdo con datos del Órgano de Fiscalización Superior, la institución encarga de reportar la deuda del estado. Sin embargo, en la cifra no se toma en cuenta los dos mil millones de pesos [50 millones de dólares] que adeuda el gobierno a la Universidad Veracruzana.

Después de qué pidió licencia, el paradero de Javier Duarte es desconocido por las autoridades, las cuales han asegurado que lo atraparán de la misma forma en que lo hicieron con el narcotraficante Joaquín 'El Chapo' Guzmán, pero hasta el momento el exmandatario continúa prófugo. En su lugar quedó Flavino Ríos, pero el próximo 1 de diciembre el cargo será ocupado por Miguel Ángel Yunes, gobernador electo del estado. Muchos veracruzanos esperan que con el cambio de administración los problemas fiscales del estado se vayan solucionando.

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