Bajo sospecha el desequilibrado balance de víctimas del tiroteo en México

Empezó con una persecución cuando amanecía el viernes.

Un gran convoy formado por fuerzas del orden federal y soldados del ejército se dirigía a un enorme rancho para investigar la denuncia de su propietario, quien alegó que "unos sospechosos delincuentes" le habían "invadido".

El convoy detectó un vehículo cargado de hombres armados no identificados. Sus pasajeros abrieron fuego contra el convoy y luego salieron a toda velocidad rumbo a una propiedad llamada Rancho del Sol, en la autovía federal que une Guadalajara con Morelia.

Las fuerzas del gobierno siguieron a los prófugos, entraron en la propiedad y, entonces, se declaró una batalla que se alargaría durante tres horas en tres escenarios distintos del rancho, de más de cien mil metros cuadrados.

Cuando se detuvo el fuego, las fuerzas del orden contaban con la baja de un agente federal. En el otro bando, los muertos sumaban 42.

El desequilibrado balance de lo que las autoridades mexicanas han descrito como un tiroteo en la zona comprendida entre Ecuandureo y Tanhuato, en el estado de Michoacán, ha despertado las sospechas de vecinos y expertos y también en las redes sociales. ¿Estamos frente a otra masacre contra civiles en México?

A lo largo del último año, este país ha padecido tres masacres en las que se ha cobrado la vida, en su mayoría, de civiles y desarmados — el asesinato de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, la masacre de la nave industrial en Tlatlaya y la matanza de individuos desarmados en Apatzingán, también en Michoacán. Los flagrantes casos provocaron que el ejército de Estados Unidos cuestionara la ayuda de más dos mil millones de dólares que el gobierno del país norteamericano había aportado para luchar contra el narcotráfico.

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Todo apunta a que los civiles iban armados durante este último tiroteo, sin embargo la gran diferencia de bajas sugiere un posible abuso de poder en la reacción de las fuerzas del gobierno tras los primeros disparos.

La Comisión por los Derechos Humanos de México envió a un equipo de investigadores al lugar del crimen el viernes pasado.

El incidente se produjo cerca de la frontera con el estado de Jalisco. Ambos estados han padecido una imparable oleada de violencia relacionada con la guerra sin cuartel por el control del tráfico de drogas, y con las disputas entre el violento cártel de Nueva Generación de Jalisco, lo que queda del cártel de los Caballeros Templarios, y otros grupos, como las milicias civiles de autodefensa, cuyo funcionamiento roza a menudo la frontera del crimen organizado.

"Ojalá no sea" dijo el especialista en seguridad mexicano, Alejandro Hope, sobre este último sanguinario episodio.

"Hay dos cosas. Primero las fotos en las que parece que los cadáveres fueron movidos. Y el segundo punto que es que recuperaron menos armas que número de víctimas", declaró Hope el sábado. "Es muy extraño".

Montones de representantes militares, abogados federales, gendarmes mexicanos, policías nacionales e investigadores de Derechos Humanos rastrearon los escombros del tiroteo. La ausencia de información oficial que se produjo horas después al baño de sangre también desencadenó las sospechas entre los residentes y los funcionarios de la zona que hablaron con VICE News.

¿Nueva masacre del Estado?— #YoSoy132 S-COMPA (@YoSoy132SC)May 23, 2015

Un trabajador de la morgue municipal le contó a un periodista que sus instalaciones se habían quedado pequeñas para poder hacerse cargo de todos los cuerpos que llegaron del rancho. Además, dentro de sus oficinas, los investigadores forenses habían visto las fotos que circulaban por las redes sociales y concluyeron que, probablemente, las fuerzas del estado habrían masacrado a algunas de las víctimas. El informador se negó a ser identificado.

Esas fotos, parecidas a las imágenes que salieron a la luz tras la matanza de Apatzingán, muestran a algunos de los muertos con rifles automáticos perfectamente encajados bajo sus manos, después de haber sido disparados. Una de las imágenes muestra a un hombre en calzoncillos tumbado boca abajo en una zona de altas hierbas. Otras imágenes sugirieron que algunos de los muertos fueron movidos de sitio.

Los agentes declararon que habían encontrado 36 armas de fuego de gran calibre, dos armas pequeñas, un lanzagranadas y un rifle calibre 50. En total, 40 armas. Hay tres individuos detenidos y 42 de los 45 sospechosos están muertos. El recuento arroja un resultado suspicaz: había menos armas que gente en el rancho.

Un tiroteo deja al menos 43 muertos en México. Leer más aquí. 

El incidente se registró a solo dos semanas de las elecciones en México del próximo 7 de junio. Hasta la fecha, distintos candidatos han sido asesinados en los estados de Tabasco, Guerrero y Michoacán.

El candidato a la alcaldía Enrique Hernández Salcedo fue asesinado a balazos el 14 de mayo, en mitad de un mitin en el municipio de Yuerécaro, en el límite entre Ecuanduero y Tanhuato, en Michoacán.

'Nuestro país no está en llamas, nuestro país no está incendiado'

Los agentes de la policía federal celebraron una rueda de prensa sobre lo acontecido en el Rancho El Sol. Fue el viernes por la noche en la ciudad de Zamora, en Michoacán, pasadas ya 12 horas del tiroteo. Apenas facilitaron un poco más de información de la que ya estaba circulando entre los fotógrafos locales, los reporteros y la policía.

El comisionado Nacional de Seguridad, Monte Alejandro Rubido García, declaró que el intercambio de disparos fue tan intenso que la policía tuvo que enviar un helicóptero Blackhawk al lugar del tiroteo. Tres sospechosos fueron detenidos.

Las autoridades no revelaron a qué organización criminal pertenecían los sospechosos, aunque fuentes locales identificaron a los caídos como miembros del Cártel Jalisco de Nueva Generación (CJNG).

La organización de Jalisco estaba acusada de haber derribado a un helicóptero del ejército el día 1 de mayo, en el que murieron 9 personas, la mayoría soldados. El cártel también había organizado una oleada de narcobloqueos por todo Jalisco y estados vecinos durante aquel día, lo que afectó a muchísima gente.

El sábado, los cuerpos de los 42 asesinados en el rancho El Sol fueron desplazados hasta la capital del estado de Morelia.

A principios de la semana pasada, el ministro del Interior mexicano, Miguel Ángel Osorio Chong, intentó asegurar al país que las autoridades electorales y las fuerzas de seguridad estaban preparadas para supervisar y garantizar unas elecciones de éxito el próximo 7 de junio.

"Nuestro país no está en llamas, nuestro país no está incendiado", dijo el ministro el pasado martes. "Tenemos casos aislados que lamentamos profundamente y estamos trabajando para que no suceda".

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Juan José Serafín Estrada informó desde Michoacán. Sigue a @VICENewses en Twitter para seguir las actualizaciones de esta noticia.