Niños con cáncer realizan manualidades en un hospital de Veracruz/Cuartoscuro.com
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En la conferencia, Yunes agregó: "se está investigando no sólo el caso de la quimioterapia. Otro es el de millones de medicamentos encontrados en bodegas que ya habían superado la etapa de caducidad".Desde aquella delicada acusación, han pasado exactamente dos meses, y la Comisión Federal para la Protección de Riesgos Sanitarios (Cofepris), que depende de la Secretaría de Salud, máxima autoridad sanitaria de México, aseguró a VICE News que el caso está cerrado: "la investigación ya concluyó (…) y la denuncia del gobernador no tuvo ningún sustento".Arturo Ignacio Tornel Moreno, director de Comunicación Social, aclaró que el titular de Cofepris, Julio Sánchez y Tépoz —quien negó una entrevista tras insistir en varias ocasiones— no hablaría del tema "por lo delicado del asunto", pero que el resultado de la investigación se basó en pruebas científicas y documentales, "y no en dichos".'No hay manera de ir más allá con las pruebas documentales que hay'.
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El representante explicó que la Cofepris analizó los expedientes médicos y clínicos del propio gobierno de Veracruz y con base en ello se llegó a la conclusión. Pero ahora la pregunta es por qué se ha finalizado una investigación que puede dar para más, pues en el comunicado con el que se da carpetazo al tema, emitido el 19 de febrero, la propia Cofepris informa que sí encontraron algunas ampolletas de Avastin (medicamento usado contra el cáncer) falsas: "Y eso fue muy grave, seguramente pudo haber más, pero definitivamente no hay pruebas documentales", justifica Tornel Moreno.El gobierno veracruzano adquirió estas ampolletas apócrifas a través de empresas de dudosa procedencia, Especialidades Médicas del Sureste y Oncopharma. La farmacéutica Roche, fabricante de medicamentos contra el cáncer, informó a Cofepris que ambas "no son sus distribuidores autorizados", y además la dependencia sanitaria no las localizó en sus domicilios sociales, aportados por la Secretaría de Salud de Veracruz.
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Hasta ahora quedan más dudas que certezas, coindicen en entrevistas concedidas a este medio Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), y José Carlos Gutiérrez Niño de Haro, director de desarrollo institucional de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer (AMANC)."Es apresurado hacer un anuncio así", alerta Pérez García cuando se le informa que Cofepris dijo a VICE News que ha cerrado el caso. La cuestión es que, "si se confirma que en Veracruz se suministró quimioterapia falsa, nos enfrentaríamos ante un crimen de Estado", agrega el representante de Redim, una organización de prestigio que promueve los derechos de niñas, niños y adolescentes en México."La Cofepris no debe cerrar el expediente. Más allá de presentar denuncias ante la autoridad local, debe demandar a la justicia federal atraer el caso para que se efectúe otra investigación. El boletín de Cofepris habla de corrupción, y esta institución necesita escuchar directamente a los pacientes que recibieron el tratamiento, a médicos que fueron parte de estos procesos. Los documentos no necesariamente dicen la verdad. Si fue una acción intencionada, podrían estar incompletos", subraya.'Seguramente pudo haber más (ampolletas falsas), pero definitivamente no hay pruebas'.
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Los números sobre cáncer infantil en México, de acuerdo con los datos de AMANC, obtenidos de cifras oficiales, dicen que la prevalencia de casos en tratamiento actual, activo o en vigilancia a nivel nacional, va de los 18.000 hasta los 23.000 casos, "pues el proceso médico no se agota en 12 meses, el número de pacientes va en ascenso", indica Gutiérrez Niño de Haro.Además, según la AMANC cada año hay 5.000 nuevos casos, lo cual coincide con el Censia, pero los menores que llegan a tratamiento, cuando mucho son 4.100, estima la asociación privada.La leucemia es el tipo de cáncer más común en los niños, en México y el mundo. En el país, de 2008 a 2014, ocupó el 51 por ciento de los casos. Le siguieron linfomas y reticuloendoteliales, con 13 por ciento.El promedio anual de muertes en la última década es de 2.150, es decir, un fallecimiento cada cuatro horas, lo que convierte al padecimiento en la principal causa de defunciones en los mexicanos entre 5 y 14 años de edad, según cifras de 2013 reportadas por el Sistema Estadístico Epidemiológico de las Defunciones.De acuerdo con la Secretaría de Salud, de la totalidad de menores de 18 años que ingresan a quimioterapia -cuando se trata de leucemia u otro tipo de cáncer-, sólo sobrevivirá poco más de la mitad.'La Cofepris no debe cerrar el expediente'.
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Mientras en México el nivel promedio de sobrevida, es decir, casos en los que se elimine el cáncer, es apenas de 51 por ciento, las tasas de supervivencia en países de ingresos altos alcanzan un promedio de 84 por ciento, informa la organización. Pero, pese a todo, ese poco más de 50 por ciento es ganancia: hace tres o cuatro décadas, era de menos de 25 por ciento.Gutiérrez, el director de AMANC, señala "que tres de cada cuatro casos inician tratamiento en etapas tardías, pues los diagnósticos no se realizan a tiempo". Los síntomas, indica, a veces son silenciosos y las primeras señales de advertencia no son tomadas en cuenta.A eso hay que agregarle el desempeño médico: "He visto que, como no se sabe qué ocurre, se ataca el padecimiento como si se tratase de una infección, cuando es leucemia. Tres meses después, se hace un análisis correcto, pero ya se perdió tiempo".'La información sobre cáncer infantil no es contundente'.
Gutiérrez lamenta la carencia de información real: "No podemos seguir permitiendo que el 75 por ciento de casos de cáncer se atiendan de manera tardía. Adelantar el diagnósticos para elevar las probabilidades de recuperación, es una tarea muy pendiente".El experto indica que AMANC trabaja en una plataforma que agregaría datos clínicos y psicosociales, "para atender de manera completa. Por ejemplo, saber quién requiere apoyo de transporte, por las condiciones de pobreza. En el caso Veracruz, se dijo que se destruyeron expedientes. Con un sistema así sería fácil dar seguimiento a cada caso. No tendríamos las dudas que ahora tenemos sobre si hubo o no quimioterapia falsa".AMANC y Redim coinciden en que las políticas de salud del Estado "son acciones temporales, ocurrencias. Lamentablemente, no hay contundencia, y el caso de Veracruz lo ha evidenciado".Sigue a Guillermo Rivera en Twitter: @riveravazgSigue a VICE News en español en Twitter: @VICENewsEs'Tres de cada cuatro casos inician tratamiento en etapas tardías'.