Captura de pantala vía YouTube
Cinco soldados guatemaltecos están en el punto de mira después de que un vídeo en el que golpean y patean a dos menores viese la luz el pasado viernes.El vídeo se ha convertido en viral y desde el viernes los guatemaltecos han expresado su enfado y su rabia en las redes sociales sobre lo que han calificado como "un abuso de autoridad" por parte de los soldados. El vídeo ha tocado un nervio sensible del país centroamericano, que ya padeció abusos militares durante décadas durante la Guerra Civil guatemalteca.Aunque el vídeo ha causado indignación entre algunos abogados de derechos humanos guatemaltecos, otros han aprobado la acción de los soldados considerando que estaban haciendo su trabajo.Guatemala está experimentando un repunte en la actividad criminal en los últimos años. En consecuencia, en buena parte de la sociedad ha empezado a arraigar la idea de que solo el ejército puede hacer frente a la violencia.El presidente Otto Perez Molina, un ex general, accedió al poder en 2012 tras ganar las elecciones con promesas de mano dura contra los criminales.Sobreviven a 'La Bestia', pero terminan detenidos por la policía fronteriza de EEUU. Leer más aquí. Sigue a VICE News en Español en Twitter: @VICENewsES
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El vídeo dura 1:43 minutos.En el vídeo se ve a los menores de pie con las espaldas contra un muro del callejón en un pueblo del departamento de Chimaltenango, en la parte central de Guatemala, el pasado 26 de julio.Un grupo de soldados con fusiles colgados de la espalda se turnan para abofetear, dar puñetazos, rodillazos y patadas a los jóvenes. "Estoy sudando por tu culpa", se escucha decir a uno de los soldados mientras golpea a uno de los chicos: "Nos has visto y has salido corriendo".En el vídeo se puede ver a los soldados lanzando un puñetazo tras otro hasta que uno de los jóvenes vomita, lo que provoca todavía más ira en los militares.La oficina del fiscal federal de Guatemala identificó el lunes a los policías envueltos en los hechos como miembros de la brigada Mariscal Zavala del ejército guatemalteco: los cabos Melvin García y Misael Chin y los soldados Luis Pacheco, Ismar López y Oscar Ramirez, que no han sido acusados formalmente hasta el momento.Funcionarios y activistas de derechos humanos guatemaltecos y una agencia encargada de investigar crímenes contra mujeres y niños hicieron público nada más publicarse el vídeo que estaban investigando los hechos. Mientras, un portavoz de ejército ha hecho público que "dos de los chicos podrían pertenecer a una banda criminal, aunque ninguno tenía el pelo rapado ni tatuajes, rasgos habituales de las bandas criminales centroamericanas más poderosas".
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