FYI.

This story is over 5 years old.

VICE World News

Ningún antídoto es lo suficientemente fuerte para detener una sobredosis de carfentanil

Los doctores están preocupados porque los usuarios de este poderoso opioide van al hospital, son atendidos, estabilizados, dados de alta y fallecen horas después porque el medicamento no puede acabar con la droga dentro del organismo.
Un kit with naloxone, antídoto contra opioides. 2014. (Imagen por Mel Evans/AP)

Síguenos en Facebook para saber qué pasa en el mundo.

Ante cientos de muertes en Estados Unidos relacionadas con el abuso de carfentanil, los expertos han advertido que el antídoto para combatir esas sobredosis no es lo suficientemente fuerte para salvar una vida.

Dicho opioide sintético es usado comercialmente para sedar grandes animales, como elefantes. La razón: es 100 veces más potente que el fentanilo y 10.000 más que la morfina.

Publicidad

Los servicios de emergencia han estado usando naloxona, ampliamente conocido por el nombre comercial Narcan, como medida para contrarrestar el efecto de las sobredosis. El Narcan puede revertir los efectos de una sobredosis por heroína casi instantáneamente, pero el carfentanil es tan potente que los paramédicos afirman que muchas víctimas requieren múltiples dosis para contrarrestar los efectos.

El tráfico ilegal de fentalino chino hacia Canadá está imparable. Leer más aquí.

Después de que la policía de Winnipeg, en la provincia canadiense de Manitoba, incautara 1.477 fichas de papel secante que contenían carfentanil, el jefe del sindicato de bomberos, Alex Forrest, dijo a los reporteros que su equipo ha atendido a, al menos, dos jóvenes con sobredosis de esa droga.

Forrest comentó que se necesitaron al menos cuatro dosis de naloxona para revivirlos, el doble de la cantidad que contienen los kits distribuidos entre los oficiales médicos de Winnipeg. Generalmente se inyecta en algún músculo, aunque también existen otras presentaciones, como spray nasal.

"No hay suficiente naloxona en las comunidades", admitió Michael Parkinson, coordinador del Consejo para la Prevención del Crimen en Waterloo, en Ontario, refiriéndose a los incidentes de Winnipeg. "Claramente dos dosis del antídoto no son suficientes para salvar la vida de las personas, o al menos reducir el daño causado por las sobredosis", añadió a VICE News.

Publicidad

Parkinson dijo que los hospitales deben revisar sus políticas y brindar equipos de emergencia con naloxona a las víctimas de sobredosis para que los tengan en casa.

El carfentanil es parte de una nueva generación de opioides sintéticos que pueden resultar fatales en dosis del tamaño de un grano de sal. Los oficiales de policía han comenzado a cargar con el antídoto en caso de que inhalen o toquen drogas por accidente que contengan fentanilo o carfentanil.

Médicos canadienses podrán recetar heroína en casos severos de adicción a los opioides. Leer más aquí.

Tanto el gobierno de Estados Unidos como el de Canadá se han comprometido a facilitar el acceso a la naloxona, además de permitir que pueda adquirirse sin necesidad de una receta médica. Hasta hace poco, sólo estaba disponible a través de paramédicos y profesionales de la salud. Varias autoridades estatales y provinciales han prometido que el antídoto será más accesible en las farmacias.

Sólo en el condado Hamilton, Ohio, las autoridades médicas han confirmado 12 sobredosis fatales asociadas con el carfentanil en los últimos meses.

Tim Ingram, comisionado de salud del condado, dijo recientemente a la agencia de medios NPR que el organismo de un consumidor necesita horas para metabolizar el carfentanil, más que con otros opioides.

Eso significa que después de que la naloxona desaparece del cuerpo, los consumidores pueden tener suficiente carfentanil dentro de sus sistema para causar otra sobredosis y morir.

Publicidad

La industria farmacéutica gasta millones para que sus drogas controladas no sean limitadas. Leer más aquí.

Mike DeWine, procurador general de Ohio, apoyó las preocupaciones de Ingram, y advirtió que las víctimas de sobredosis que reciben naloxona y son llevadas al hospital siguen corriendo el riesgo de morir por una sobredosis, incluso después de haber sido dados de alta.

"Los que estamos viendo es que la gente es revivida, llevada al hospital, monitoreada, dada de alta y luego de dos horas después de haber salido están muertas, porque el antídoto no se quedó en su sistema lo suficiente", dijo.

Sigue a Rachel Browne en Twitter: @rp_browne

Sigue a VICE News En Español en Twitter: @VICENewsEs