Hablamos con los jornaleros en huelga de hambre por la libertad de Andrés Bodalo

Si atendemos al relato de diarios como Libertad Digital o ABC, Andrés Bódalo es un "criminal violento" culpable, entre otras cosas, de la "brutal agresión a una embarazada". En este tipo de medios, poco amigos de la lucha obrera, retratan al concejal de Jaén en Común como un huelguista agresivo que visitó Venezuela (no podía faltar), invitado por el régimen bolivariano, y que goza además del apoyo de Arnaldo Otegi.

No sabemos si es tan fiero como lo pintan este señor, condenado a tres años y medio de cárcel por agredir a un edil socialista en 2012 durante una protesta. Pero sí sabemos que está de actualidad porque sus compañeros del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) han peregrinado hasta Madrid y han plantado un campamento donde exigen su libertad manifestándose en huelga de hambre. La petición de indulto cuenta con el apoyo de Pablo Iglesias, Ada Colau, Alberto Garzón y ahora también con el de la alcaldesa madrileña Manuela Carmena, que los ha realojado de la puerta del Sol a la plaza de Lavapiés.

Visitamos el toldo en el que beben sirope de arce y Aquarius vigilados por dos doctores y recogen firmas para la liberación de Bódalo (fue candidato de Podemos al Congreso) y nos encontramos con un ambiente de reivindicación de trabajadores del campo.No vemos ni rastro de violencia porque, cómo dice su portavoz José Caballero: "somos más de okupar bancos y entrar en ministerios pero no queremos que nuestras acciones dañen la situación de Andrés". La banda sonora perfecta sería ese cántico de "en la plaza de mi pueblo, dijo el jornalero al amo: "nuestros hijos nacerán con el puño levantado". Y acaba: "qué mi voz suba hasta el monte, qué mi voz baje al barranco, hasta que los jornaleros se apoderen de los campos".

Caballero sostiene que "le acusan de pegarle al teniente alcalde de Jódar, pero los vídeos y el testimonio de la Guardia Civil demuestran que no hubo violencia y ahora las televisiones le criminalizan y acusan de hechos que sucedieron en una huelga general en la que él ni estaba". En el cuarto día de ayuno confiesan sentirse cansados pero contentos con la respuesta de Carmena que les ha prometido "que va a intentar acelerar el caso y hablar con el partido socialista de aquí para que pida también el indulto". Su plan es mantener la huelga como mínimo hasta el 5 de junio, que empieza la campaña electoral, pero con intención de no abandonar hasta que sus quejas sean atendidas.

Algunos de los manifestantes se alojan en el edificio de la Coordinadora para la Memoria Histórica y Democrática de Madrid y aseguran que la gente del barrio "responde con solidaridad, se acerca, pregunta, colabora, nos ofrecen su ducha. El pueblo de Madrid en general nos da mucha fuerza".