Kate del Castillo estaba sujeta a vigilancia desde 2014

Este artículo fue publicado originalmente en VICE News, nuestra plataforma de noticias.

Kate del Castillo —la actriz que llevó a Sean Penn a entrevistar al Chapo– estaba sujeta a vigilancia por su relación con el líder narcotraficante desde más de un año antes de la reunión que se llevó a cabo en el Triángulo Dorado.

A raíz de la captura del Chapo el viernes pasado, las autoridades dijeron que el monitoreo del contacto con los actores y los productores contribuyó a la búsqueda que se inició tras su escape de la cárcel por un túnel el año pasado. Un oficial anónimo dijo a la agencia Asocciated Press que la entrevista con Penn en octubre para un artículo de la revista Rolling Stone dio lugar a un operativo en el que casi detienen al Chapo en ese entonces.

El Universal publicó un artículo con detalles de la vigilancia de Del Castillo donde asegura que la relación entre la actriz y Guzmán se estableció antes de su escape del penal de máxima seguridad El Altiplano y continuó después de que Guzmán se volvió un fugitivo. Antes de su encuentro, el contacto se llevaba a cabo por medio de cartas cuando Guzmán seguía preso y por medio de reuniones entre la actriz y los abogados de Guzmán.

El artículo respalda sus argumentos con fotos que supuestamente se tomaron antes y durante las reuniones. También incluye fotos de ella y Penn durante su reunión con los abogados de Guzmán el 2 de octubre del año pasado, momentos antes de partir hacia el escondite del Chapo para hacer la entrevista.

El periódico dijo que el personal de inteligencia empezó a vigilar a Del Castillo desde agosto de 2014. Se cree que el Chapo ordenó a Andrés Granados Flores, uno de sus abogados, que la contactara para hablar sobre una película autobiográfica de Guzmán Loera. El Chapo y la actriz platicaban sobre el proyecto por medio de cartas que hacía llegar el equipo legal de Guzmán.

La primera reunión cara a cara entre Del Castillo y Granados tuvo lugar el 16 de junio 2015 –casi un mes antes de la fuga del Chapo– en el restaurante San Ángel Inn, ubicado al sur de la Ciudad de México. El periódico afirma que hay fotografías de la reunión donde se ve a la actriz vestida con una blusa negra y una falda blanca, mientras que el abogado llevaba un traje negro.

Relacionados: Rolling Stone revela el video de 17 minutos del Chapo

El Universal dijo que Del Castillo y Granados se reunieron de nuevo después de la fuga del Chapo el 25 de septiembre del año pasado en la ciudad de Guadalajara. La fotografía que publicaron muestra a la actriz tras su llegada por Aeroméxico, en el vuelo 783, proveniente de Los Ángeles.

En otra fotografía tomada al día siguiente se le ve sentada en un restaurante con Granados y Óscar Manuel Gómez Núñez, otro miembro del equipo legal de Guzmán.

En el artículo dice que Del Castillo se reunió con los abogados dos veces en esa ocasión. La primera fue para cenar y la segunda fue a la mañana siguiente, cuando le dieron un teléfono especial que le permitía comunicarse directamente con Joaquín Guzmán.

La fecha de esta reunión se confirma en el artículo de Sean Penn en Rolling Stone, donde afirma que el 28 de septiembre, su contacto con Del Castillo le confirmó que iba a poder reunirse con el Chapo.

Penn escribió que él y Del Castillo viajaron de Los Ángeles a una "ciudad en el centro de México" en un avión privado cuatro días después.

De acuerdo con el artículo en El Universal, la ciudad a la que se refirió Penn era Guadalajara y el avión era un jet privado Hawker 900XP. El periódico publicó una foto de la reunión entre los actores y el abogado. Después de llegar, se trasladaron al Hotel Villa Ganz, se registraron, dejaron a su equipaje y se retiraron.

El periódico afirma que los actores abordaron dos camionetas para trasladarse de Guadalajara a Tepic, Nayarit. También en el articulo de Penn dice que viajaron a otra ciudad pero no mencionó su nombre.

Los dos recuentos dicen que el grupo abordó dos aviones privados –El Universal dice que uno era blanco y otro era amarillo– en un complejo turístico que cuenta con una pista aérea con destino al Triángulo Dorado.

Según el artículo de Penn, viajan en compañía de Alfredo Guzmán, uno de los hijos del Chapo.

Penn señaló en su artículo que tenía miedo de que rastrearan la aeronave pero que se tranquilizó después de que el hijo del Chapo señaló un "emisor de interferencias con un interruptor rojo debajo de los controles de la cabina" y le explicó que servía para bloquear los radares terrestres y que un infiltrado les proporcionaba información cada que despegaba el avión militar de vigilancia a gran altitud.

Relacionados: Sean Penn entrevistó al Chapo y eso ayudó a las autoridades a capturarlo

"Confía plenamente en que ningún extraño no deseado nos vigila", escribió Penn.

Robert J. Bunker, un experto en tecnología y armamento militar, expresó su confusión.

"No tiene sentido", dijo Bunker, profesor adjunto en la división de política y economía de la Universidad Claremont Graduate, en una entrevista para VICE News. "Si ese dispositivo existiera, estaría en todos nuestros aviones".

Bunker dijo que no sabía de ningún sistema de emisión de interferencias para burlar radares diseñado para aviones pequeños e hizo una lista de formas hipotéticas en las que podía funcionar. Sin embargo, las descartó todas y dijo que ese tipo de tecnología y organización no es más que el sueño de los criminales.

Bunker insinuó que alguien pudo haber "vendido a los narcos un 'sistema de emisión de interferencias de alta tecnología' que en realidad no funciona". Otra posibilidad es que le hayan dicho eso a Penn para tranquilizarlo.

Más tarde llegaron al Triángulo Dorado. Tras un largo viaje por carretera por fin se reunieron con el Chapo. La reunión duró siete horas, durante las cuales platicaron, tomaron tequila, comieron tacos y planearon una segunda reunión ocho días después para una entrevista de dos días.

Esta no tuvo lugar porque tres días después del encuentro entre el Chapo, Penn y Del Castillo, el capo huyó por poco de un operativo armado para su captura.

Una fuente no identificada en la Policía Federal de México dijo a la agencia Associated Press que la entrevista con Penn fue lo que desencadenó ese operativo.

Sin embargo, algunos no están muy convencidos.

El columnista Raymundo Riva Palacio escribió este lunes en la página Eje Central que las autoridades ya conocían la ubicación precisa del Chapo en la Sierra antes de la entrevista.

Relacionados: Cómo se convirtió Kate del Castillo en la celebridad rebelde que reunió a Sean Penn y al Chapo

Riva Palacio dice que aunque el monitoreo de Del Castillo proporcionó información útil en la persecución del Chapo tras su fuga, su presencia en la zona y la de Penn lo que hizo en realidad fue posponer el operativo para tratar de capturarlo.

"El gobierno de EU solicitó que el operativo para capturar al Chapo se pospusiera 72 horas", dijo Riva Palacio a VICE News e insistió en que tenía dos fuentes confiables para confirmar su argumento. "Mi teoría es que ponen énfasis en los actores porque están protegiendo a alguien más, tal vez algún agente encubierto".

Al final, el Chapo logró escapar de ese operativo y fue capturado hasta el pasado viernes 8 de enero, en la ciudad de Los Mochis, Sinaloa.

El lunes se publicó un video filmado con una GoPro donde se ve la etapa inicial de la redada en una casa de seguridad donde se escondía el Chapo.

En los 15 minutos que dura el video ocurren múltiples disparos y arrestos mientras los agentes buscan al Chapo.

El Chapo escapó de la casa usando el sistema pluvial de la ciudad a través de un túnel dentro de uno de los clósets de la casa. Fue capturado horas más tarde, después de salir de una coladera y abordar un vehículo robado para huir de la ciudad.

El artículo de Penn generó mucha polémica tras su publicación el sábado por la noche. La estrella dijo que "no tenía nada que esconder" en una breve entrevista con la agencia Associated Press. Del Castillo aún no ha hecho ningún comentario al respecto más que lo que le dijo a un reportero de Univisión: "Cualquier cosa cuando debe ser y como debe ser. No me vuelvas a llamar".

Jo Tuckman contribuyó a este reportaje.

Sigue a Nathaniel Janowitz en Twitter.