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guerras y conflictos

Así protege Duterte a militares filipinos: 'si violan a tres mujeres, diré que lo hice yo'

Durante una visita a una base militar que está en la línea de combate contra el Estado Islámico, el presidente ofreció una garantía de impunidad a las fuerzas armadas de su país. "Ustedes hagan su trabajo. Yo manejaré el resto", ordenó.
Imagen por PPD Handout/EPA

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El polémico presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, ha vuelto a escandalizar a su país con una declaración que parece ser una garantía de impunidad para las fuerzas armadas de su país.

"Seré encarcelado por ustedes. Si violan a tres (mujeres), diré que lo hice yo", proclamó Duterte este viernes, mientras visitaba una base militar que está en la línea de combate contra el yihadismo.

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El nuevo presidente de Filipinas prometió derramar sangre, y lo está haciendo. Leer más aquí.

Los dichos del abogado de 72 años ocurren en un contexto de suspensión de garantías individuales: desde el martes pasado, Duterte impuso una ley marcial en la región sur del estado de Mindanao como respuesta a las acciones de combatientes identificados con el grupo terrorista Estado Islámico que han atemorizado dicho territorio.

"Sobre esta ley marcial, sus consecuencias y sus ramificaciones, les aviso que sólo yo seré responsable. Ustedes hagan su trabajo. Yo manejaré el resto", proclamó el mandatario a los soldados.

Rodrigo Duterte gobierna el país asiático desde el 30 de junio de 2016 y en poco tiempo se ha ganado la enemistad de organismos defensores de derechos humanos, como Amnistía Internacional y Humans Rights Watch, los cuales consideran que bajo su mandato se han alentado y tolerado delitos graves como ejecuciones extrajudiciales, desapariciones forzadas y tortura.

No es la primera vez que el mandatario filipino polemiza con sus dichos sobre agresiones sexuales: en abril del año pasado, cuando era candidato presidencial, "bromeó" sobre una misionera australiana que fue violada y asesinada durante un motín en una prisión ubicada en la provincia de Davao, donde Duterte fue alcalde.

Un candidato presidencial de Filipinas no quiere disculparse por su 'broma' sobre una violación. Leer más aquí.

"Me fijé en su cara, y pensé 'puta madre, ¡qué pena! La violaron todos'. Yo estaba furioso porque ella había sido violada, porque ella era tan hermosa… Pensé 'el alcalde debería haber sido el primero (en violarla)'".

Aunque en aquellos días hubo decenas de políticos filipinos que le exigieron una disculpa pública por sus comentarios, Duterte se negó a ofrecerla argumentando que se trató de un chiste. Y semanas más tarde, pese a sus recurrentes comentarios vulgares, se volvió el actual presidente.

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