FYI.

This story is over 5 years old.

VICE World News

Las protestas de estudiantes que piden educación gratuita en Chile se tornan violentas

Los estudiantes piden a la actual presidenta Michelle Bachelet cumplir la promesa que hizo de revisar el sistema educativo del país durante su campaña en 2014. Su principal preocupación es el alto coste de la educación a nivel profesional.
Photo par Max Radwin/VICE News

Síguenos en Facebook para saber qué pasa en el mundo.

Los estudiantes en Chile afirman que no pueden retener su impaciencia y frustración ante el fracaso del gobierno para cumplir sus promesas de brindar educación gratuita.

"Tenemos que protestar por una mejor educación", dijo Javier Viablanca de 15 años, presente en una de las numerosas marchas por Santiago, capital del país, algunas de las cuales se han tornado violentas. "Los estudiantes han estado luchando por esto durante años. Nuestra generación quiere y necesita un cambio".

Publicidad

Los estudiantes piden a la actual presidenta Michelle Bachelet cumplir las promesas que hizo de revisar el sistema educativo de Chile durante su campaña en 2014 para un segundo mandato de cuatro años.

Están particularmente insatisfechos con el informe presidencial realizado el 21 de mayo, en el cual ella decía que la reforma educativa estaba en "marcha", además de ser "un proceso gradual". En el discurso, llevado a cabo en Valparaíso donde se ubica la legislatura de Chile, Bachelet dijo que un proyecto de reforma será enviado al congreso en junio, pero no ahondó en lo que ésta contendría.

Las manifestaciones se volvieron violentas en Valparaíso, y los protestantes lanzaron cócteles molotov, y un guardia de seguridad murió sofocado en uno de los dos edificios a los que prendieron llamas.

"La presidenta Bachelet no logró hablar de nuestras demandas el 21 de mayo", contó varios días después a CNN Chile Marcelo Correa, uno de los líderes de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (CoNes). "La gente responderá en las calles".

La principal preocupación del movimiento de estudiantes chilenos es el coste de la educación a nivel profesional, el cual se ha incrementado un 87 por ciento entre 2005 y 2012, de acuerdo a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Maestros mexicanos aumentan protestas antigubernamentales. Leer más aquí.

La educación universitaria en Chile es una de las más caras del mundo, pidiendo a las familias que paguen un 75 por ciento de los costes, contrariamente al 40 por ciento que pagan, por ejemplo, en Estados Unidos, según información de World News y Education Reviews.

Publicidad

El gobierno mantiene un programa de becas que ha pagado la educación del 55 por ciento de estudiantes este año, dijo Bachelet en su discurso. Pero no todas las universidades son elegibles, dijeron algunos estudiantes, y aún deja a casi la mitad sin ninguna ayuda.

Durante su campaña, Bachelet hizo la promesa de asignar 15.000 millones de dólares para superar la educación y el sistema de salud durante su mandato, pero sólo 765 millones del presupuesto de 2016 están destinados a la educación.

Parte del problema es que el dinero simplemente no está ahí para que el gobierno lo gaste. A pesar de que Chile ha tenido una de las economías más prosperas de Sudamérica durante la última década, el déficit fiscal del país ha incrementado desde que Bachelet asumió el poder en 2014, mientras que el Producto Interno Bruto (PIB) ha comenzado a caer gradualmente, resultando en un mediocre 2,1 por ciento el año pasado.

La semana pasada, con la desilusión que provocó el discurso de Bachelet todavía circulando entre la comunidad estudiantil a lo largo del país, miembros de la CoNes vestidos con gorras color naranja, se hicieron pasar por un grupo de turistas, para después irrumpir en el Palacio de La Moneda, edificio gubernamental de gran importancia en Santiago. Los estudiantes, que llevaban una lista de quejas para la presidenta, fueron sometidos y arrastrados fuera de la propiedad.

(Imagen por Max Radwin/VICE News)

La reforma educativa ha sido lenta porque el sistema legislativo de Chile no está orientado para hacer cambios tan extensivos, de acuerdo a Fernando Atria, un profesor de derecho en la Universidad de Chile.

Publicidad

"La Constitución bajo la cual vivimos, dictada en 1980 durante el periodo de Augusto Pinochet, fue diseñada para prevenir cambios significantes en el modelo político y económico", dijo.

Atria comparó la Constitución de Chile con una camisa de fuerza cuando se enfrenta con grandes reformas. Esto podría explicar porqué un movimiento en 2007, que abogaba por educación de calidad y por el fin de las universidades privadas, tuvo un ligero impacto en el estado de la educación chilena.

El fracaso de 2007 provocó una nueva ola de activismo estudiantil en 2011 para luchar por una nueva Constitución, así como por educación universitaria gratuita. Los estudiantes no consiguieron ninguno de estos puntos, a pesar de que fue el movimiento más grande desde que Chile volvió a la democracia en 1990. El gobierno chileno lanzó un programa de becas que sigue siendo cuestionado.

El año pasado, la corte constitucional rechazó puntos importantes del plan de Bachelet para ofrecer educación profesional gratuita a la mitad de los estudiantes más pobres de la nación, argumentando que pedirles asistir a ciertas universidades asociadas al programa podría ser considerado discriminación. Sin embargo, lo que quedó del plan permitió que Bachelet enviara 200.000 estudiantes de bajos recursos a la universidad sin coste alguno para ellos.

El tono fatalista del informe de Bachelet del mes pasado parece haber sido la última gota derramada para los estudiantes.

Publicidad

La violencia de las manifestaciones subsecuentes alcanzaron tal nivel para el final de la semana pasada que, según reportan, una de las protestas en Santiago terminó con 117 arrestos y 32 policías heridos.

'Que la vieja política no siga rehuyendo los cambios necesarios'.

Estudiantes comenzaron una manifestación no autorizada en la plaza central a una calle de la Universidad de Chile, y después obstruyeron el tráfico en una de las principales rutas de la ciudad mientras sostenían una enorme pancarta en la que se leía, "estamos hartos de esperar".

La policía intervino rociando a la multitud con cañones de agua y lanzando gas pimienta desde vehículos blindados, mientras cientos de estudiantes contestaban con piedras.

"Los estudiantes en Chile han estado protestando durante muchos años para cambiar el sistema educativo", dijo Matías González de 20 años, estudiante de la Universidad de Chile, quien acababa de correr lejos de una nube de gas pimienta, y empapado por un cañón junto a sus amigos. "Y seguiremos manifestándonos con permiso o sin él".

La probabilidad de que haya otras manifestaciones fue enfatizada por Camila Rojas, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECh), en un artículo de opinión que escribió en el portal La Tercera.

"Estamos movilizados, tenemos propuestas y queremos ganar. Que la vieja política no siga rehuyendo los cambios necesarios".

Sigue a Max Radwin en Twitter: @MaxRadwin

_Sigue a VICE News En Español en Twitter: @VICENewsEs_