Presidente de Filipinas podría enfrentarse a la Corte Penal Internacional por crímenes

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El controversial presidente filipino Javier Duterte, podría enfrentar una investigación por parte de la Corte Penal Internacional por crímenes contra la humanidad luego de que un abogado presentara una denuncia basada en el testimonio de un hombre que asegura haber sido parte de los llamados "escuadrones de la muerte".

Desde que Duterte, de 71 años, asumió la presidencia en 2016, se estima que han sido ejecutados más de 7.000 "sospechosos" a manos de policías y grupos de vigilantes, generalmente jóvenes, que han asesinado a supuestos criminales.

En las 77 páginas que componen la denuncia, Jude Sabio acusa a Duterte de ser un "asesino masivo", además de que implica a 11 oficiales del gobierno en crímenes contra la humanidad. Bajo la administración de Duterte, el asesinato de sospechosos por narcotráfico y otros criminales se ha vuelto una práctica recurrente, afirma Sabio.

A través de una carta de presentación, Sabio escribió: "su fallo en contra de Duterte no solamente serviría para los nobles fines de la justicia internacional, también significaría el final de esta oscura, obscena y mortal era en Filipinas".

El sustento para esta denuncia viene de uno de los clientes de Sabio, Edgar Matobato, quien sostuvo frente al Senado de Filipinas haber formado parte de uno de los escuadrones que actuaba bajo las órdenes de Duterte. Sin embargo, el Senado concluyó que no había evidencia para respaldar las afirmaciones de Matobato.

El caso también se basa en el testimonio del policía retirado Arturo Lascanas, así como en reportes de grupos defensores de los derechos humanos y los medios, incluyendo una serie de textos publicados por la agencia de noticias Reuters.

Fadi el Abdallah, vocero de la Corte Penal Internacional, no quiso emitir ningún comentario sobre el fallo. Por su parte, Duterte aún debe reaccionar públicamente, aunque tomando en cuenta sus comentarios anteriores, es muy probable que no le preocupe ninguna posible investigación.

"No me intimidarán, ni podrán detenerme con nada, ¿la Corte Penal Internacional? ¿un juicio? Si es algo por lo que tengo que pasar, adelante", dijo Duterte ante los medios el mes pasado.

En la denuncia se asegura que Duterte ha cometido crímenes contra la humanidad desde que era alcalde de su ciudad natal de Davao, e incluso el presidente ha admitido anteriormente que existen lazos entre él y los llamados Escuadrones de la Muerte de Davao.

Cuando se convirtió en presidente de Filipinas en junio de 2016, Duterte expandió su violenta campaña en contra de traficantes de drogas y adictos en todo el país. El programa ya ha cobrado la vida de más de 7.000 personas, de acuerdo a las organizaciones Human Right Watch y Amnistía Internacional, aunque otros reportes indican una cifra de hasta 9.000 muertos.

En febrero de este año, Duterte se vio obligado a parar temporalmente su campaña después de que un oficial de policía mató a un empresario surcoreano. Sin embargo, la campaña continuó sólo un mes después, aunque el jefe de la Policía Nacional, Ronald de la Rosa, aseguró que la campaña sería "menos sangrienta, sino es que completamente libre de sangre".

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